Los gastronómicos y trabajadores de salones de fiestas llevan adelante una protesta y una “olla popular” en la plaza Independencia. De esa forma, el sector pidió diálogo y una revisión de las restricciones a la circulación y el horario de cierre de los locales en la provincia, medidas dispuestas por el Gobierno ante la segunda ola de coronavirus.

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“El objetivo de la marcha es que el Gobierno tenga diálogo. Representamos a mucha gente, hay muchos puestos de trabajo en juego. Pedimos que nos reciban, que tengamos algo en concreto para poder salir delante. Somos conscientes de la situación sanitaria, jamás estaríamos en contra de ello. Simplemente, solicitamos poder trabajar para mantener nuestros negocios”, expresó Marcelo Flores, integrante de la Cámara de Actividades Gastronómicas de Tucumán, organización que nuclea a más de 200 bares y restaurantes.

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El empresario gastronómico remarcó que las cafeterías pueden trabajar a la mañana y a la tarde, pero los restaurantes, sandwicherias,  cervecerías y salones de fiestas registran los mayores ingresos durante la noche. “Nos vemos afectado en el 80%”, enfatizó en una entrevista con “LA GACETA Central” por el cierre a las 23.

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Fernández también cuestionó la alta presión fiscal provincial. “Tenemos más de 25 impuestos extorsivos. Y ahora nos quitan el mayor movimiento”, añadió.